Cuando se firma un contrato de arrendamiento, es crucial entender todos los pagos asociados con el proceso, especialmente aquellos que se deben realizar al inicio. Uno de los conceptos que frecuentemente genera dudas, especialmente entre quienes arriendan por primera vez, es la comisión por colocación del inmueble.
Esta comisión es un pago único que debe hacer el arrendatario al momento de formalizar el contrato. Su valor corresponde al 20% del canon mensual de arrendamiento, más el impuesto al valor agregado (IVA), según lo establecido por el gobierno nacional. El propósito de esta comisión es cubrir los gastos operativos y administrativos relacionados con la colocación del inmueble, es decir, el proceso de encontrar, evaluar y aprobar al arrendatario.
Aunque no existe una regulación legal específica que imponga este cobro, se ha consolidado como una práctica habitual en la ciudad de Medellín y el departamento de Antioquia.
<p>Esta costumbre mercantil está respaldada por la Cámara de Comercio de Medellín para Antioquia, lo que le otorga legitimidad y respaldo en el sector inmobiliario local</p>
